Desde que a comienzos de semana la banda catalana Mourn compartió a través de sus redes sociales un duro comunicado en el que acusaba a su sello español Sones de tener secuestrada la publicación de su nuevo disco, entre otras cosas, estamos esperando la respuesta del sello procedente de Barcelona.
En un comunicado hecho público a través de sus perfiles en redes sociales también, Sones muestra su perplejidad ante las acusaciones de la banda, y defiende que todo cuanto se les imputa en el comunicado es estrictamente falso.
Según afirman desde el sello, el trabajo en Sones siempre se ha caracterizado por «desarrollo, impulso y creación de proyectos desde el compromiso con los artistas que nos gustan, en los que creemos y con los que compartimos ilusiones«, y ha sido así como han trabajado también con Mourn, a quienes aseguran haber «promocionado y ayudado a seguir creciendo y evolucionando como artistas», para lo que ha creado «un tejido global para que el proyecto musical de Mourn pueda llegar más allá de nuestras fronteras, a nuevos mercados y a la mayor cantidad de público posible«.
Frente a las acusaciones de la banda de haberse quedado con adelantos y haber retrasados pagos, el sello afirma que todo lo que han hecho hasta el momento por la banda ha supuesto «muchas horas de trabajo, de inversión de fondos y esfuerzo diario y supera ampliamente lo que razonablemente se les podía haber exigido como sello y la agencia de management«, a lo que añaden que se ha hecho, a día de hoy, a pérdida.
Por último, el sello termina el comunicado afirmando que el problema ha intentado resolverse «de forma privada, siempre con la mejor voluntad y buscando no perjudicar la carrera del grupo», y que ahora su mayor deseo es «poder solventar la situación lo antes posible de manera interna y por vía legal, que las canciones sean publicadas y extraer alguna lección de este episodio tan incómodo».
Esperamos, por el bien de ambas partes, que se resuelva pronto y amistosamente.
