Parece que el día de hoy viene lleno de buenas noticias, y es que Enric Montefusco, quien fuese durante 20 años líder de Standstill, acaba de anunciar su retorno a la música. Por primera vez en solitario bajo su propio nombre, Montefusco va a publicar un nuevo disco que llevará como título Meridiana, el nombre de la Avenida de Barcelona donde creció y que saldrá a la venta después del verano a través del sello Buena Suerte. Como él mismo explica a través de un nuevo perfil en Facebook, «no se trata tanto de una narración biográfica como de un retrato cultural y social de lo que recibí, de lo que recibimos, un retrato de clase, de clase trabajadora«.
Pero no es el único proyecto que nos anuncia hoy, ya que dada «la tremenda dificultad para hacer viable los montajes escénicos en el circuito musical«, según sus propias palabras, se ha lanzado a preparar una obra para el circuito de teatro. Se llamará Tata Mala y se estrenará los días 8, 9 y 10 de Julio en el marco del Festival GREC de Barcelona. Según nos explica, para ella ha podido contar con numerosos artistas y para formar una experiencia bastante única: «Se trata de juntar a personas con talentos muy dispares, hasta 30 personas en escena para generar una especie de experiencia colectiva. A partir de una voz infantil, intento llegar a un lenguaje simbólico, el lenguaje del ritual. La obra se basa en un texto que no he escrito yo y que me conmovió desde el primer momento. El espectáculo, en ese sentido, además de temática, sensibilidad y algunas de mis nuevas canciones, también compartirá con el disco una re-aproximación a la cultura popular. Mi experiencia me ha llevado a pensar que esta revisión es cada vez más necesaria, ahora que lo que llaman Cultura y la sociedad parece que apenas se cruzan. También parece que, si lo hacen, solo es en tanto que productos (mercantiles o institucionales). Bueno, pues esta obra, además de apuntar al corazón, intentaría ser lo contrario: un lugar donde todo el mundo puede participar y reflexionar sobre su propia historia y condición, en lo psicológico y en lo político».
Solo decir que nos alegramos enormemente de este retorno de Enric Montefusco a la música, así como saber de su primera experiencia teatral. ¡Bienvenido de vuelta!