El cantante estadounidense está regresando poco a poco a la actualidad tras haberlo pasado francamente mal debido a una enfermedad en la médula espinal, que entre otras cosas, le exigía reposo absoluto.
Él mismo reconoce que no se podrá mover como antes, pero que está deseando volver a tocar. Y nosotros saber de él ya que hace casi 6 años de su último trabajo Modern Guilt. Lo que más nos ha gustado de sus últimas declaraciones ha sido que en febrero de 2014 verá la luz Morning Phase, como ya os contamos recientemente. Es un regreso muy esperando, en nuestra cabeza aún retumban grandes piezas como Loser, Sex Laws y otras tantas que forman parte del brillante legado del cantante.
Pero si algo nos indica que Beck ha recuperado su energía son las críticas destructivas hacia la plataforma de música streaming Spotify. Como ya hicieron Thom Yorke, el líder de Foals y otros tantos detractores del sistema de música online, Beck señala que una de las cosas que más le horroriza es la mala calidad de sonido. También critica los beneficios que se obtienen de esta plataforma con los que da a entender que no se cubren gastos básicos.
Ya sabéis que nos gusta ofrecer todo tipo de opiniones ya que es un tema que siempre genera controversia y en un mundo tan amplio como el ámbito musical, se generan posturas muy diversas.
Desde luego, Beck regresa con energías, tanto físicas como mentales. No sabremos en qué tendencia se moverá su nuevo trabajo, si se decantará por un sonido más folk o volverá a la psicodelia alegre en la que muchas veces nos ha metido pero, sin duda, hay muchísimas ganas de volverle a tener en la cresta de la ola indie.
