Si sus precedentes trabajos ya nos avisaban de una banda a tener en cuenta, junto con directos de notas punzantes, ahora redondean su, probablemente, mejor trabajo. Canciones rápidas, sencillas, cortas y contundentes. Sí es verdad que no aportan nada nuevo al panorama rock-punk, pero siempre es bueno saber apreciar cuando a base de influencias se forja un álbum más que decente, y sobre todo si las cosas se han hecho bien.
Es necesario remarcar que quizá el trabajo, tras varias escuchas, pierda esa magia y rabia inicial con la que nos deja, y pueda sonar repetitivo con el paso del tiempo. Una elección de temas hubiera sido más acertada para reducirlo a un bloque compacto de canciones breves y concisas donde no nos dejara tiempo para respirar. Pero The Enemy ha comenzado a recorrer el camino, y es el camino correcto.
Y es que no es nada malo ver en ellos, salvando las distancias, reflejos melancólicos de grupos como The Jam o The Libertines. Por eso es por lo que llenan conciertos o se cuelan con facilidad entre los más vendidos. A pesar de que sus guitarreos y golpes rítmicos de batería no son ninguna novedad, saben hacerlo y ofrecen un puñado de temas bailones y juveniles.
Aunque la criticada fanfarronería del grupo está en boca de ciertos sectores, también es necesario admitir que si son así es porque quizá se sientan cómodos con sus canciones, ya que con Streets in the Sky pueden presumir por un largo tiempo de haber ofrecido un aire fresco a este 2012 musicalmente hablando. Éste será el álbum que suene de fondo en las fiestas de verano juveniles, porque es música de jóvenes para jóvenes, y The Enemy ha sabido transmitirlo.
PUNTUACIÓN CRAZYMINDS: 7/10