The Coral nunca serán famosos, al menos no tanto como deberían. Y es que son raros. No siguen las modas, no son especialmente guapos, no beben de los 80 ni se suben al carro de la electrónica o los ritmos étnicos. No, ellos van a lo suyo, que no es otra cosa que hacer canciones atemporales, deudoras de un tiempo pasado donde todo era mejor, más autentico. La sombra de los 60, de sus grandes grupos y su sonido eterno revolotea en cada surco de sus discos. Poco a poco, desde aquel primer y sorprendente The Coral, estos seis chicos de Liverpool han ido depurando su sonido hasta llegar a este último y magnífico Butterfly House, sin duda alguna su mejor trabajo hasta la fecha.
Parece increíble que, después de tantos discos, estos chicos aún se guarden en la manga canciones tan buenas como Walking in the Winter o la maravillosa Another Way. Y así hasta 17, que son los temas que nos ofrecen en este nuevo trabajo en donde la influencia de sus referentes habituales (The Doors, Pink Floyd, The La’s) convive más que nunca con el sonido americano de Buffalo Springfield ,The Byrds y, sobre todo, de unos Crosby Still and Nash muy presentes en temas como 1000 Years o Coming Through the Rye, que son puro David Crosby, o Falling All Around You, una preciosa balada folk que bien podría haber firmado Grahan Nash.
Además, armonías vocales y sonido a lo Byrds en Two Faces, psicodelia evocadora en Coney Island, guitarras abrasivas en North Parade, folk alegre y veraniego en Into the Sun… y así una tras otra, canciones maravillosas, rescatadas de un cofre hundido en el fondo del mar para poner banda sonora a un verano perfecto.
The Coral, como si de H.G Wells se tratase, no pertenecen a esta época, sin duda viajan en la máquina del tiempo para traernos lo mejor de una música que gracias a gente como ellos nunca morirá.
PUNTUACIÓN CRAZYMINDS: 9/10