Lykke Li es un lento veneno. Un lento veneno dulce y adictivo. Pero un veneno al fin y al cabo. Y todos, todos, sabemos que la introducción de un veneno en el organismo determina una acción química o físico-química que modifica la composición y las propiedades de los componentes con los que el veneno se pone en contacto y, como consecuencia de ello, provoca grandes desequilibrios orgánicos o funcionales e incluso la muerte. Todos lo sabemos. Pero si no te enamoras profundamente, si no sientes nada, si no quieres a Li Lykke Timotej Zachrisson hasta la mismísima muerte, si no la amas, si no te entra un escalofrío por la espalda y encuentras el sentido de la vida, si no te calma, si estos versos o poemas heridos Wounded Rhymes no te conmueven…es que no mereces vivir.
Lykke Li nos presenta su segundo larga duración Wounded Rhymes, después de su gran primer LP Youth Novels (2008) (búsquenlo y escúchenlo si no han tenido aún el placer), con 10 temas de su folk/soul/étnico/jazz/tropicalista, 10 canciones más intimistas pero que desgarran igual que embelesan.
Es imposible hablar del disco sin hablar de la voz de la señorita Lykke Li. Su gran voz acuna cada una de las canciones, las agranda, las trasciende. Es miel para las moscas. Su voz salvará el mundo. Y a mi. Y a ti.
Wounded Rhymes es un disco cantado a la herida. Es sal para esa herida. Es agua de mar para la herida. Para esa herida de amor, de amor herido. De desamor. Un disco honesto, jodidamente honesto y descarnado.
También resulta imposible hablar de la envoltura de las canciones, de sus atmósferas, de sus toques étnicos, tropicales, incluso del soul, del jazz, del folk sin saber quién es Lykke Li. Ya que nada es casualidad, ni artificioso en su música.
Así que pregúntate quién es Lykke Li, pregúntatelo, venga, hazlo. Venga, tú puedes. No te oigo. Bien, ahora sí. La señorita Lykke Li nació en Ystad, Suecia, y se trasladó a Estocolmo de pequeña. Después vivió en una montaña de Portugal, luego en Lisboa, más tarde, pasando alguna temporada en India y Nepal. A todo esto le une un par de años en Brooklyn, Nueva York, donde sacó el primer disco. Creo que a partir de aquí puedes empezar a escuchar de veras a Lykke Li. Como, por ejemplo, en esta belleza de canción (del primer disco, Youth Novels: http://www.youtube.com/watch?v=modXbqbsAvs)
Wounded Rhymes puede ser, sin duda, uno de los mejores discos del año. Con su primer hit, Get Some, la canción más animada y bailable del disco, barrerá la geografía musical seguramente si no lo hace ya. Ritmos étnicos, voz soul, actitud pop star, letra brutal, gran video. Quiero casarme con ella.
Pero Get Some, Youth Knows No Pain, Sadness is a Blessing o Rich Kids Blues son las únicas canciones en esa línea, debido a que Wounded Rhymes se viste también de forma más intimista en canciones igual de dañinas para el alma, por su belleza, canciones como Unrequited Love, I Follow Rivers o Jerome.
Canciones de amor, de desamor, de rabia contenida, con mucha mala hostia pero tan tan dulces que darías las gracias si te las estuvieran cantando a ti y luego llorarías, mientras bailan sobre tu tumba. Pero una tumba preciosa y dulce, eso sí.
Puedes escuchar todo el album en este link: http://www.lykkeli.com/music.htm
PUNTUACIÓN CRAZYMINDS: 9/10