En una primera escucha echas de menos ciertas cosas que les han caracterizado desde un principio, sobre todo su frescura, característica que tanta fuerza les daba y definía, vaya, que no parece nada especialmente atractivo. Es posible que tenga mucho que ver el hecho de que sus anteriores trabajos entraban a la primera y este exige más atención, ya que una vez mejor y más veces en nuestros pabellones auditivos, nos hacen apreciar una serie de nuevos rasgos interesantes que valen mucho la pena. No podemos hablar de un mal disco, aunque se pueden encontrar algunos temas de relleno, y si afinamos, vemos un sonido de más calidad, unos instrumentos más trabajados y canciones poco simples en estructura. Innegable que contiene temas buenos, tanto los que más nos recuerdan a su inicio (pocos, pero algunos, como Dead or in Serious Trouble, o Child of the Jago, letra de la cual viene el título), como los más trabajados y posibles singles futuros, aparte de Little Shocks, que ha sido primero, Long Way from Celebrating, o Man on Mars. Pero aparte de estas y unas pocas más como Coming Up for Air o Starts With Nothing, ambas magníficas, echo en falta elementos más sencillos y espontáneos, esos coros en los que se limitaban a repetir una sílaba a lo “na na na na na”. Para romper varias lanzas a su favor, un tema no sólo con sabor Beatles, sino también estupendo, When All Is Quiet y If You will Have Me, con maravillosos arreglos de violín y una vocalización totalmente distinta a la habitual, vamos, que no diríamos que se trata de los Kaiser Chiefs.
Respecto a las que se han quedado fuera, les daba como para lanzar un disco doble, ya que, en general, no se diferencian notablemente del resto del disco. A destacar Can’t Mind my Own Business, guitarra electrificada de algún modo que suena estupenda y Cousin in the Bronx, festivalera y con sus fragmentos tan electrónicos y típicos de sus anteriores trabajos.
Disco memorable, sólo echando un poco de menos ese gamberrismo gritón, esos teclados junto con sus sencillas y potentes guitarras. Nostalgia punk romántica, tal vez. Aún así, un buen disco. Muy bueno.
PUNTUACIÓN CRAZYMINDS 8.5/10