InicioDiscos – ArchivoJANE'S ADDICTION - THE GREAT ESCAPE ARTIST

JANE’S ADDICTION – THE GREAT ESCAPE ARTIST

JANE'S ADDICTION - THE GREAT ESCAPE ARTISTEs profundamente complicado realizar la crítica del nuevo disco de una gran banda que hizo dos trabajos incunables hace ya más de veinte años. Me gustaría poder ser tan objetivo como para obviar lo hecho hasta ahora y ser capaz de centrarme única y exclusivamente en el disco que nos ocupa. Me gustaría ser tan frío y mentiroso como para deciros que he escuchado The Great Escape Artist, el nuevo trabajo de los Jane’s Addiction, sin tener en cuenta su Nothing’s Shocking (1988) y su Ritual de lo Habitual (1990). Pero no lo haré. No, porque el pasado es parte de un grupo y no se puede ignorar sin más. No, porque el valor de cada nuevo disco de un grupo se debe en parte a la suma de sus experiencias pasadas. Farrell ha expresado en diferentes ocasiones que le atrae el futuro y los cambios. Es absurdo decir «somos un grupo nuevo ahora» o «esto no suena a nada de lo que hemos hecho antes». Pues cámbiale el nombre al grupo y no nos cuentes milongas. Es muy duro cargar con el peso de haber hecho algo grande en el pasado, se arrastra a cada paso que se da posteriormente, pero uno ha de acostumbrarse y no obsesionarse con ello. Afortunadamente, para Jane’s Addiction, en medio de sus dos grandes obras y este nuevo disco también está Strays, un trabajo menor que alivia la responsabilidad de lo que nos trae The Great Escape Artist.

 

Normalmente, las bandas clásicas apoyan sus trabajos nuevos en tres pilares importantes, un nombre consagrado, un disco superlativo en los comienzos de su carrera y una escena musical que ha trascendido al tiempo. Una vez tienen estos tres vértices asentados, a muchas de ellas poco les importa lo que hagan para rellenar el espacio entre ellos. En ocasiones experimentan y en ocasiones se dejan llevar confiados en que sus pilares aguantarán cualquier cosa que editen.

 

Creo que este disco podría ser capaz de sostenerse por sí solo, aunque tengo un terrible runrun en mi cabeza que me dice que, de no estar cimentado en los tres preceptos antes citados, posiblemente ni siquiera estaríamos hablado de él.

 

Con una portada que nos recuerda instantáneamente a sus primeros trabajos, podríamos pensar en una vuelta a sus orígenes, pero nada más lejos de la realidad. El disco busca sonidos atmosféricos, propone un trabajo oscuro y denso que por momentos se hace más pausado de lo que uno está dispuesto a permitirles. Las complejas estructuras y el rock de difícil clasificación han sido cubiertos por un sonido que busca la calma y se rodea de arreglos electrónicos. Se busca incluso la épica en temas como The Irresistable Force, las referencias a otras grandes bandas como U2, Muse o Radiohead (que ellos mismos anunciaron) están presentes a lo largo de todo el trabajo. Hay un cambio de rumbo sumamente explícito que no va a contentar a sus fans más clásicos, pero que les puede acercar a muchos otros que están todavía pensándose en casa si escuchar a unos viejos rockeros o no.

 

El disco en sí mismo no tiene singles que despunten. Yo destacaría el conjunto sobre las partes, algo positivo en mi opinión. En cualquier caso, si buscáis temas que puedan engancharos rápidamente, os recomiendo Words Right Out Of My Mouth, Irresistible Force o la joya escondida que siempre os recomiendo, en este caso Ultimate Reason, absolutamente embriagadora. Flojean en Twisted Tales o Broken People, aunque el disco se completa muy dignamente con temas como Underground, Splash a Little Water on It, End To The Lies, Curiosity Kills y I’ll Hit You Back.

 

Para finalizar, quisiera volver a incidir en lo dicho al principio de esta reseña. Nos encontramos ante un disco muy capaz de sobrevivir por sí mismo, aunque alejado tanto en tiempo como en forma de sus predecesores, fantasmas que le persiguen y que, por mucho que se pretendan obviar, les susurran al oído «estos no somos nosotros»

 

PUNTUACIÓN CRAZYMINDS : 7/10
spot_img