Esta vez el productor ha sido Mark Stoermer, bajista de The Killers. Pánico entra al pensar en los destrozos que en ocasiones productores de cierto nombre o popularidad hacen con ciertos grupos, reinventándolos de manera absurda en algo que nunca quisieron ser. Afortunadamente, el grupo liderado por la carismática Juanita Stein sigue empeñado en repetir fórmula, su fórmula. Es decir, rock, folk, country en ocasiones, y guitarras.
Su debut homónimo y Radio Wars, representan, a la vez que unos álbumes de obligatorio disfrute, quizá una carga comparativa excesiva en cualquier trabajo que los australianos puedan sacar, pero intentanto evitar comparaciones, The Loudest Engine se trata de un buen álbum.
Charlatan e Into The Sky abren el álbum ofreciéndonos minutos de fuerza y rock, presagio de lo que sucederá. La voz de Juanita, los coros y las guitarras se hacen sentir. ¿Influencias? The Velvet Underground, The White Stripes y Black Rebel Motorcycle Club. Si se puede elegir, es de sabios acertar.
Secrets es un tema que, aunque baja el ritmo de intensidad, probablemente sea unos de los mejores temas de todos. Medio tiempo, que evoluciona, coge fuerza, vuelve a sí mismo, coro logrado y estribillo sencillo. Parece fácil hacerlo.
Por rescatar los cortes con más fuerza, que es donde mejor se desenvuelven estos músicos, la country Live On, The Loudest Engine, demasiado psicodélica. El resto se enmaraña en ocasiones en un pozo de notas confusas, pero rescatamos la gran Baby Blue, ejercicio de guitarra, blues y soft-rock, dejando un buen sabor de boca al final de todo el trabajo.
Era de esperar lo que nos podían ofrecer Howling Bells, pero gusta a pesar de seguir en la misma línea, pero es que la línea es buena, es sana y es la correcta.
PUNTUACIÓN CRAZYMINDS: 6.5/10