Ellos es pop, eso no se puede rebatir, pero es un pop que ha pasado por muchas fases. La verdad es que han vivido muchas evoluciones, pero si algo resume su periplo por la música es su personal forma de auto gestionarse. Mientras que cualquier banda en su sano juicio mataría por entrar a formar parte de un sello discográfico, Ellos vive su propia historia, en sus propias bases creativas y con sus propios principios. No sabemos si es bueno, malo o terrible, pero les da un margen de originalidad, como quien tiene su propio huerto y prescinde de las grandes superficies.
Este punto artesano les influye en no ser una banda de grandes escenarios, pero tampoco creemos que sea el objetivo principal de la formación compuesta por Guille Mostaza y Santi Capote. Si su último trabajo se distribuye en cassette, entendemos que les gusta este punto de banda minoritaria, pero selecta.
Pop Cabrón es el título de su quinto elepé pero hubo material previo. Nos basaremos en fuentes oficiales. Pop Cabrón les viene como anillo al dedo como definición genérica de las letras más corrosivas del indie español, aunque atención, les hemos visto más crápulas.
12 perlas para todos los gustos. 12 historias, 12 recorridos diferentes por la vida. Una sola actitud. En sus discos, sólo caben 12 canciones. Ya lo dicen: O lo dejas o lo tomas.
En este trabajo bailaremos, pero lo haremos de otra forma. Nos dejamos un poco de lado el pop más naïf y nos pasamos al socorrido pop electrónico en una vertiente más marcada. La voz tiene valor pero pesan más los sintetizadores. Lejos quedaron las épocas de Subterfuge o Pias, pero tampoco se encuentran a un abismo de distancia.
El disco se abre hábilmente con O tú o él o yo. Y recalcamos lo de hábil, porque ayuda a seguir escuchando el disco, aunque no es su mejor canción. La letra, vinculada al drama sentimental corriente en el siglo XXI, ya denota el cambio de sonido.
Es curioso pero el meollo del disco se encuentra lejos de las primeras pistas. No queremos decir que los discos tengan un orden, pero de forma inconsciente uno siempre acaba oyendo las primeras canciones y a veces se destierran discos porque en esos primeros contactos no hay motivos para seguir adelante. Tu tiempo está acabando es una canción más, recordándonos un poco a Varry Brava aunque con más batería y algo más rockera. Extraña melodía tiene un colaborador de auténtico lujo: Iván Ferreiro y este juego de voces le da potencia a este tema.
Prisa comienza a darnos luces de esperanza a Pop Cabrón y afirmamos que es del gusto del gran público. Más electrónica, más afín a lo que nos tienen acostumbrados y no vamos a mentir: Cualquier letra que tenga un punto de nostalgia frente al paso del tiempo suele cuajar bien. Quizás la hubiera seleccionado como single de presentación del álbum.
Aunque te rías de mí también me parece el mejor tema, de lejos, de este álbum. Ese aire ochentero pero muy bien resuelto y la pasión de la letra ayudan a ser la canción sobresaliente. Nos recuerda en algunos aspectos a La Casa Azul y en directo se antoja maravillosa.
Tarántulas y súcubos es la oda perfecta a los sonidos noventeros que parece que prodigan en este nuevo trabajo, pero una vez la letra ácida ayuda bastante a ponerle un contexto especial. No finjas le continúa y parece que Ellos disfrutan tocándola en directo y nosotros oyéndola, así que entre estas dos canciones tenemos un tándem de lujo.
Ente Superior se presenta algo más oscura, aunque siendo sinceros las estructuras musicales no son muy variadas y los instrumentos tampoco destacan, pero las letras marcan todo tipo de diferencia. Es un detalle muy obvio, pero cada grupo trabaja más un aspecto y en este caso Ellos aunque hay más elaboración, tampoco hay innovación.
Lengua Viperina es el tema más pausado del álbum, aunque no nos dejemos engañar, que en directo le dan más caña. Con un sonido diferente, más guitarrero llega Una mancha en tu historial, dejando un poco de lado los teclados y sintetizadores. Nos gusta para encauzar la recta final.
Estrella Patria y Nuevo Imperio, cuya colocación en el listado de canciones no habrá sido al azar, nos traen un buen final, con la canción más larga de las doce presentadas.
¿Conclusiones sobre este trabajo? Por un lado, destacaremos que hay mucho más trabajo de estudio y que ese resultado salta a la vista en los escenarios con la presencia de más músicos y otro tipo de sonido. Y no decimos que en otros álbumes el trabajo fuera insuficiente, hablamos de diferencias.
Viven inmersos en el pop pero no vamos a quejarnos porque Ellos fueron y son unos grandes embajadores de este sonido. Recoge un puñado de buenas canciones, otras más memorables, otras más prescindibles pero es un disco que cumple la función de entretenimiento.
Pero, por otro lado, el paso del tiempo puede erosionar este tipo de fórmulas, aunque parece que están en buena forma a nivel musical. Es un disco agradable de oír, pero tiene sus baches.
Eso sí, el ingenio salva cualquier debilidad y nos quedamos con las letras fetiches, descaradas y llenas de pasión que nos regalan Ellos. ¡Nos quedan muchos bailes gracias su contribución!
