Después de los últimos proyectos del cantante y guitarrista de Green Day, Billie Joe Armstrong, que han incluido un musical de Broadway basado en uno de sus álbumes que de aquí poco se convertirá en una película de Hollywood y de lanzar tres discos en cuatro meses, nos trae un nuevo trabajo musical, Foreverly, esta vez producido por Reprise Records.
Se trata de una colaboración con la cantautora de jazz Norah Jones con quien pretenden recrear, canción por canción, un álbum de The Everly Brothers del 1958, Songs Our Daddy Taught Us, haciendo así su propio homenaje a la pareja de Kentucky. En esta ocasión, el papel de Don lo hace Armstrong, y Jones toma el puesto de Phil.
Una de las cosas que hacen interesante este trabajo es que no se trata de una recopilación de diferentes éxitos de los de Kentucky, tal y como hicieron Dawn McCarthy y Bonnie “Prince” Billy. Sino que escogieron un álbum en particular (el ya citado Songs Our Daddy Taught Us) formado por canciones tradicionales del folk y el country que Phil y Don habían aprendido de sus padres, y escritas por iconos del género americano como Charlie Monroe, Tex Ritter o Gene Autry.
El cantante de Green Day tuvo que cambiar el registro vocal al cual estaba acostumbrado y que todos conocemos, y remplazar el rock por un tono mucho más suave que combina perfectamente con la dulzura de la voz de Jones. Posiblemente, si en la portada del disco no saliera el nombre de Armstrong ni su foto, sería muy difícil reconocerlo.
Cabe destacar que, al tratarse de un dueto formado por una voz femenina y una masculina, conducen las canciones hasta sitios que los Everly no podían, añadiendo dinamismo y tensión sexual a las canciones que tratan conflictos románticos y una calidad de abrazo fraternal a las piezas de amor familiar. Por ejemplo, inyectando unas tonalidades de sensualidad oscura a temas populares como Barbara Allen o Roving Gambler.
La voz lenta de Jones consigue transmitir sensaciones de ansiedad y dolor en canciones como I’m Here To Get My Baby, o tristeza fúnebre en la balada Down In The Willow Garden. Una voz femenina que añade profundidad emocional en estos temas que no era presente en las versiones cantadas de los The Everly Brothers. Aunque la combinación de la voz de Armstrong y Jones no consiguen la intimidad sin fisuras de los de Kentucky.
A diferencia de las versiones que formaban parte del disco original de The Everly Brothers, las cuales sólo estaban acompañadas de guitarras y armonías vocales; en el álbum de Armstrong y Jones existe la participación de más instrumentos como la batería, el violín, el banjo o el piano. Pero estos no tienen el protagonismo en las canciones, pues el elemento importante de éstas son las voces de los dos cantantes americanos. La inclusión de más instrumentos llega a ser muy eficaz en temas como Long Time Gone o, especialmente, en Down In The Willow Garden.
El resultado es un álbum folk y country (posiblemente más que el original), fácil de escuchar y muy agradable para los oídos. Un buen homenaje a The Everly Brothers. Consigue que los que conozcan las canciones de los de Kentucky revivan las sensaciones que tuvieron cuando los escucharon por primera vez; pero también que, para toda aquella gente que no supiera de la existencia de los Everly, quiera descubrir su discografía. Un elogio al country a manos de dos artistas que, por individual, no forman parte de este género, pero que juntos han conseguido rejuvenecer este estilo propio del sur de América.
PUNTUACIÓN CRAZYMINDS: 7,5/10
