InicioDiscos – ArchivoBIG UPS – EIGHTEEN HOURS OF STATIC

BIG UPS – EIGHTEEN HOURS OF STATIC

Hacía tiempo que no escuchaba un debut tan lleno de rabia y mala baba como el de Big Ups, grupo de formación clásica de cantante, guitarra, bajo y batería (Joe Galarraga, Amar Lal, Carlos Salguero Jr y Brendan Finn). Con su primer larga duración consiguen una intensa media hora a la que ni le sobra ni le falta nada y, aunque los ecos de épocas pasadas son evidentes, no creo que su intención fuera innovar.

Pueden ser a ratos los Melvins, a rato los Pixies o Shellac, punks, hardcore o grunges pero guitarras e intensidad están salpicadas por unos toques melódicos que les hacen destacar. Su ACTITUD y la energía de su directo conforman su razón de ser.

Van al grano y no les hace falta hacer un disco con canciones de relleno y una duración estándar para, a empujones, hacerse un hueco entre la competencia y dar una patada en la puerta de los principales medios para hacerse escuchar.

Lo que sí se podría debatir es hasta qué punto una banda que hace un género, que digámoslo así, ha pasado sus mejores momentos, puede alcanzar relevancia crítica y llegar a los primeros puestos de lo mejor del año o tener una carrera larga alejada de los hypes. Quizás la respuesta esté en lo que consigue Big Ups, más que un homenaje o la intención de sonar de esta o cualquier otra forma, lo que es alabable es sonar a ellos mismos pero notándose todo tipo de influencias. Habrá que comprobar con el paso del tiempo y las siguientes referencias publicadas si van notándose menos esos grupos a los que recuerdan, algo por otra parte bastante común en bandas primerizas, y cómo van adquiriendo una personalidad propia más marcada.

El álbum empieza con Body Parts, con una introducción calmada, hasta que la rabia de Joe Galarraga da pistas de por dónde van los tiros. Los mejores momentos del disco son cuando claman justicia y no confían en una humanidad adormecida en Justice y Goes Black, primer single (del que os dejamos aquí el videoclip, grabado en directo y que es bastante representativo de los neoyorquinos).

En Grin, la sección rítmica empieza teniendo el protagonismo hasta que todo se acelera demostrando su lado más hardcore. Wool es la canción más larga (de hecho es la única que supera los 3 minutos) y es la canción triste del disco, según palabras propias del cantante y compositor Galarraga. Y como muestra de otra de sus características, las letras oscuras y morbosas, encontramos Fresh Meat.

La banda de Nueva York que dio sus primeros pasos en 2010 y publicó el EP Wake Up en 2011, parece que es ahora cuando puede dar el gran salto, sólo el tiempo lo dirá.

PUNTUACIÓN CRAZYMINDS: 7/10

Escúchalo aquí:

 

spot_img