Y cerramos una edición inolvidable de Sónar Festival con esa agridulce sensación que siempre se tiene en la última jornada de un festival. Lo repasamos…
Bomba Estéreo
Esta bomba colombiana se impuso como la reina de la pista mientras bailaba de un lado a otro entre banderas de Colombia y un público entregado a los movimientos de cadera.
Un concierto que animó a todos en lo poco que faltaba para desplazarse al Sónar de noche.
Swindle
Ráfagas de Jazz y Swing y hits intercalados, Swindle obtuvo una ovación de cada persona que había en el escenario SonarVillage. Entre Oh! Y Wow! fue la cosa y es que no pinchó ni una mezcla mala, ni una sola lenta. Es más, el espacio se llenó más que ningún día del festival. Sabe lo que hace y se nota.
Evian Christ
Todo el mundo estaba expectante, la sala Hall estaba a oscuras y de repende humo a grandes cantidades empezó a salir del escenario, entonces apareció Evian Christ, y el espectáculo comenzó.
Se notó la profesionalidad de Emmanuel Biard porque fue un verdadero placer oír al británico mientras toda la sala estaba pendiente del juego de increíbles luces que nos absorbía por completo en ese ambiente tan futurista.
F.K.A Twigs
Sin duda uno de los más deseados por el público del Sonar. F.K.A Twigs arrasó con toda su fuerza. Tiene una especie de halo de energía en sus movimientos que nos obliga a todos a seguirla y a querer dejarnos llevar igual que lo estaba haciendo ella.
La diva Tahliah Barnett demostró su talento en la danza y potencia de su voz, y su elegancia hizo justicia. Aunque fue uno de los conciertos principales del Sónar, se trataba de un pop psicodélico extraño que a veces se entrelazaba y era bastante predecible. Aun así, ver a la artista es toda una experiencia, sobre todo por su especial carisma en el escenario.
Flying Lotus
Posiblemente uno de los que más veces ha participado en el festival barcelonés. Su electrónica pura mezclada con una variedad de estilos que van del Jazz al Hip Hop hicieron bailar 60 minutos seguidos a todo el público. Su música envolvente, junto con una puesta en escena muy potente visualmente, trasladó al público a una dimensión lleno de harmonias y colores saturados.
The Chemical Brothers
Un concierto 10 para un grupo 10. Born in the Echoes, su nuevo disco con el que forman un pedazo de show, como el de ayer que empezó por Hey boy, Hey girl, y siguió hasta una locura y un no parar lleno de luces, espectáculo y electrónica bien metida en los oídos.
Exitazos y canciones nuevas nos noquearon e hicieron de ese concierto el casi final esperado del festival del año.
Siriusmodeselektor
Y siguiendo con la época de lo audiovisual, Siriusmo + Modeselektor + Pfadfinderei dieron la pincelada que faltaba con su gran obra de imágenes proyectadas en pantallas superpuestas que fue una auténtica pasada.
Un año más, otro Sónar que contar, y mucho que dormir. Nos vamos con un balance bastante positivo de este festival siempre tan diferente.
Fotografías: Laura Valcárcel
