En un principio la serie tiene la intención de contar los primeros días de James Gordon en la policía de la ciudad y de paso el origen de varios villanos míticos, Joker, Hiedra venenosa, Pingüino, Catwoman y Enigma y como no la creación de Batman tras el asesinato de los padres de Bruce Wayne. Curiosa intención esta, al ser un personaje siempre enigmático envuelto en “las sombras”.
No es poca cosa tener semejante objetivo, con el riesgo que suponen los numerosos militantes fans de los cómics, aunque también con una facilidad de promoción envidiable.
Tras el primer episodio no se pueden sacar conclusiones definitivas pero si algunos indicios.
Visualmente se nota el poderío, no obstante ha sido producida por Bruno Heller (Roma, El Mentalista) con no pocos planos de la ciudad. Y aunque tengo que decir que no soy un gran fan de los que verán fallos en cada línea de guión o desarrollo de personaje, algunas cosas encajan un poco con calzador.
Entre los actores hay un poco de todo, ninguno son grandes estrellas, pero algunos dan buena pinta como por ejemplo Robin Lord Taylor (Pingüino) y algunos como Ben McKenzie (James Gordon) no tanta. Parece ser que la trama va a prescindir un poco del mundo superhéroe para centrarse en la investigación policíaca y el género del thriller. Aunque visto el capítulo emitido no se cumple esta premisa.
Esperemos que les haya podido el ansia de querer hacer un episodio piloto más que un primero y el querer mostrar todas las cartas (con introducción de todos los personajes) les haya hecho resultar confusos. Puede que con algún capítulo más veamos por dónde quieren ir y si se cumplen las expectativas que se habían levantado desde una maquinaria de promoción casi imparable.
Os dejamos el tráiler del segundo episodio…
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