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Entrevista Crazyminds con… David Marqués: “Hugo Silva es la película, él lleva toda la película sobre sus hombros”

David Marqués regresa con una propuesta que recuerda en cierto modo a sus primeras películas: es independiente, rodada con libertad, cámara al hombro… y posee unos diálogos mordaces; pero cuenta como protagonista con uno de los actores más comerciales del panorama nacional: Hugo Silva. Como él mismo ha dicho en una entrevista concedida a Crazyminds junto a otros compañeros, ha conseguido hacer un híbrido entre dos tipos de cine aparentemente incompatibles y le ha añadido un punto que a más de un crazyminder gustará: la música de Tyla, líder de Dogs D’Amour. El resultado lleva por nombre Dioses y Perros, un film que retrata la vida de un sparring -o lo que es lo mismo: el que se deja golpear en los entrenamientos de boxeo-, que convive con un gran sentimiento de culpa. David Marqués expone además el mapa de su vida, todo lo que rodea a este personaje: familia y amigos con serios problemas, la crisis… Las Siete Tetas de Vallecas…
Sus dioses y perros, con todas sus aristas, han salido de Madrid y han paseado por multitud festivales y se han llevado varios premios del público. Ahora le toca opinar al de las salas convencionales.
Crazyminds: Después de haber hecho En fuera de juego, que era otro tipo de cine, más comercial, vuelves a hacer una película más pequeñita, ¿cuáles son las ventajas e inconvenientes de hacer cine comercial y cuáles las de hacer cine independiente?
David Marqués: Yo estaba acostumbrado a hacer cine sin ataduras, lo he hecho como me ha dado la gana, con amigos, sin dinero, adaptándome a lo que tenía, y cuando hice En fuera de juego me metí en un proyecto comercial además de ajeno, porque el guión no era mío, entonces me sentí un poco cohibido a la hora de jugar con ese material, y es algo de lo que me he arrepentido siempre. Dioses y Perros, que es del mismo productor, de Kiko Martínez, era un proyecto que yo ya conocía, lo conocía porque cuando terminé En fuera de juego en la productora estaban ya con ese proyecto con otro director, otro reparto… Pasaron dos años y entonces el proyecto hizo un reset absoluto y el guión (de Jesús Martínez Balmaseda) llegó a mis manos y lo que le propuse a Kiko fue empezar de cero, yo lo quería era lo que no hice con En fuera de juego, coger un proyecto ajeno y llevarlo a mi terreno, al terreno que yo conocía, porque drama no había hecho, entonces lo que hice fue desdramatizar ese drama, llevarlo a la cara B, de vale tú puedes estar pasándolo muy mal, viviendo una situación muy difícil, sufriendo mucho, pero a lo largo de un día tú te puedes levantar llorando y puedes estar aunque solo sea una hora feliz y alegre. Pues eso es lo que quería enseñar, pero sin frivolizar sobre la crisis y sobre los dramas personales de cada personaje. Ese fue el reto, el saltar de género a género. Era algo que en una producción quizá más comercial no podría haber hecho, no podría haber experimentado de esa manera. Tuve la suerte de poder hacer un híbrido entre el cine comercial y lo que yo había hecho hasta ahora.
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P: Está ahí ese fondo social, Vallecas, gente que con la crisis ha quedado afectada, ¿qué parte de ese reflejo social hay en la película?
DM: Yo creo que el paisaje que rodea a los personajes ya dice mucho. Están paseando y todo se alquila, se traspasa, se vende. Hay una decadencia en ese aspecto. Yo lo que quería era centrarme en no generalizar, no hacer una película sobre la crisis, sino hacer una película sobre las consecuencias en ciertas personas, o sea, coger al parado 3.224.422 y centrarme en él, y no solo reflejar la crisis sino situaciones personales del día a día. Todo esto visto a través de los ojos de un único personaje que era Pasca (Hugo Silva), que era el que tenía otro tipo de problemas. Él se ha autoimpuesto la vida que está llevando, él se autoflagela, él podría haber sido un dios y es un perro, hasta que despierta de eso, porque otra persona entra en su vida y porque su hermano que, a priori, puede ser el personaje más fatalista y deprimido de todos, es el más vitalista, es el que le empuja. Quería plasmar eso sin frivolizar sobre unos problemas muy graves y que están fastidiando la vida de muchas personas.
P: Pero es una película también de sueños por cumplir, de hecho en un momento le haces decir al personaje que interpreta Megan Montaner: “no hay sueños imposibles sino personas incapaces”.
DM: Sí pero el personaje de Pasca se ríe de eso. Quería mostrar las dos caras porque sí que es cierto que tienes que autoconvencerte de que puedes salir de una situación, pero es que muchas veces no depende de ti, depende de un cúmulo de circunstancias que te ha tocado vivir, no solo depende de la actitud que tengas. En este caso Pasca lo que necesita es actitud, ella la tiene, pero sigue teniendo problemas… lo que pasa con el profesorado ahora, que están de interinos y vete tú a saber cuándo trabajan… O las leyes de las herencias, esa cosa que ha estado en su vida, en la familia y ahora por culpa de esta crisis o por culpa de unos impuestos, se la tiene que quitar de encima, y es suya. Pero ella se toma las cosas de otra manera, Pasca es mucho más escéptico por eso se ríe de eso. Pero claro, tienes que mantener tus sueños vivos, o por lo menos que los que te rodean los mantengan, porque en el caso de Pasca él se ha dormido, pero porque él ha querido, se ha tomado el somnífero para dormirse en la vida que lleva… porque él es el causante de lo que le pasa a su hermano, de lo que le pasa a su amigo… entonces dice: ‘yo les apoyo, pero me quedo aquí’.

El cine español está teniendo éxito en taquilla pero porque hemos aprendido a vender las películas”

C: De hecho él decide hacer algo muy serio para digamos ‘mejorar’ la vida de las personas a las que ha fastidiado… ¿tú qué serías capaz de hacer para mejorar la vida del cine español?
DM: Yo creo que se está mejorando, estamos teniendo éxito ahora en taquilla, pero creo que es porque hemos aprendido a vender las películas, porque si te fijas todas las que están funcionando es porque están teniendo una campaña de promoción detrás que no teníamos hasta ahora. Ahora las televisiones que se involucran en las películas hacen una campaña como las que pueden hacer las majors con el cine americano, te están machacando durante un mes con una película y cuando ya se ha estrenado te siguen machacando. No se hacía mejor cine español o peor hace unos años, lo que pasa es que no tenían esta maquinaria de promoción, ahora prácticamente cada peli que se estrena –no es nuestro caso (risas)-, tiene esa campaña. Quien lo ha sabido hacer siempre bien es Santiago Segura y por eso sus pelis han funcionado, ¡porque está en todos los lados! Eso creo que se tiene que hacer para que una película funcione, porque ya te digo que muchas veces no depende de la calidad de la película. Yo por ejemplo estoy muy satisfecho, yo mi trabajo ya lo he hecho, que es que cuando hay una sala llena de gente, la gran mayoría se lo pase bien, y esto ya lo puedo decir porque ya he estado en seis o siete festivales con la peli y he visto que funciona, la gran mayoría sale contenta, no le puedes gustar a todo el mundo porque eso es imposible, no hay una sola película en la historia del cine que a todo el mundo le guste, de eso soy consciente… pero sí intento que a la gran mayoría le guste. Pero mi trabajo no es llenar la sala, eso depende de una maquinaria de marketing que yo no domino.
C: Pero, ¿qué harías ya no sólo para tener éxito en taquilla? Porque muchos cineastas me cuentan que es que siguen sin poder vivir de esta industria ni siquiera cuando sus películas ya se han estrenado en cines con buena aceptación… ¿Qué se puede hacer para que una vez hecho el producto todas las personas involucradas puedan vivir de él?
DM: Hombre, se supone que tú cuando haces un trabajo lo cobras… Yo mis pelis independientes las he hecho yo y sabía a lo que me enfrentaba, pero cuando te metes en un circuito comercial… ¿qué pasa? Que una película da trabajo a muchísima gente, pero es que se hacen muy pocas películas, se tendría que fomentar el poder hacer más cine, no sólo ya por trabajar, sino porque creo que es bueno para un país, Hacienda ha ganado un montón de dinero con estas películas que están funcionando tan bien, es decir, que da beneficios no sólo a la gente que las ha hecho, pero bueno, no sé… Si alguien tuviera la fórmula secreta todas las películas serían un éxito, no habría fracasos.

P: La presencia de Hugo Silva entre el reparto también ayuda…
DM: El reparto para mí es la película. Hugo es la película. El personaje de Pasca está oscilando entre tres vértices que son el hermano, el amigo y la chica, y va pivotando ahí y bueno, lleva toda la película sobre sus hombros. Si Hugo no estuviera bien, la película se caería por todos los sitios (…) Yo cuando escribí el guión la verdad es que no pensaba en nadie, fue todo tan rápido… Me dieron el guión y lo reescribí en cuatro días y no tenía a nadie en mente, yo lo primero que quería era llevármelo a mi terreno y luego ya… a los dos días se lo pasamos a Hugo porque pensamos que era una buena elección y fue meterse y empezar a ensayar todos los días, fue una carrera de fondo y… bueno, no me imagino la película con otros actores ahora mismo.

Mis primeras pelis son gente hablando, y si gustan o no gustan es por culpa o gracias a eso”

C: Cuando hablas de llevar a tu terreno el guión me imagino que te refieres sobre todo a los diálogos, que me parecen uno de los grandes fuertes de la película, son muy irónicos, muy gamberros… ¿cuáles son tus influencias para escribir así?
DM: De los amigos… y de la vida… (risas).
C: ¡Y de los bares!
DM: (Risas) Sí, sí, es un poco eso. Yo de hecho mis primeras pelis son gente hablando, es que Aislados son dos tíos en una casa hablando, y si gusta o no gusta es por culpa o gracias a eso, entonces yo me siento muy cómodo así, lo que procuro es que no haya autocensura en los personajes. Si estás tratando la amistad de dos tipos o una relación de hermanos ahí no hay autocensura, ahí no hablan como si alguien les estuviera escuchando, no tienen miedo de parecer racistas, homófobos o lo que sea, porque sabe cada uno cómo es el otro. Es un peligro porque hay gente a la que le puede chirriar, pero sí, a mí me encanta eso, me encanta que los personajes hablen así, hablen como en la vida.
C: En Dioses y Perros, en un momento en el que dos personajes están sentados en el sofá viendo la tele, incluyes imágenes de una de tus películas, Desechos
DM: Sí porque si teníamos que pagar a alguien derechos, pues dije, ¡que me los paguen a mí! (risas)
C: No era por invitar a la gente a ver el resto de tu filmografía entonces…
DM: (Risas) ¿Sabes lo que pasa? Que yo es que quería que en la película estuvieran Adriá Collado y Eric Francés y como no podía ser de otra manera, les incluí así (risas).

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